Sigo ...
Esta vez me dirijo a un lugar, ciertamente, curioso : “Les Escletxes d’El Papiol” (Las grietas, de un pueblo llamado El Papiol).
Les “Escletxes” son el resultado de la fragmentación de un bloque calcáreo en el periodo mioceno, cuando el mar que esxistía en este lugar (ahora interior) desaguó hacia zonas más bajas, donde actualmente se encuentra (el mar Mediterráneo).
Debido a este proceso, al vaciarse tal volumen de agua, se originó un movimiento de masas con desplazamientos que dieron lugar a la fragmentación de parte del fondo marino existente entonces y que hoy día encontramos a cielo abierto en este lugar del interior.
Por la acción mecánica que ello conllevó, se vió más afectada la parte “externa” de ese bloque calcáreo (a la derecha de la fotografía) que es la dirección en la que se produjo la evacuación del agua, siendo de mayor tamaño las grietas que se originaron cuanto más a la derecha veamos y de menor tamaño cuanto más a la izquierda nos fijemos.
Saliendo del pueblo tomo un camino de tierra bien marcado y llego a una zona rocosa con abundante vegetación.
Debo estar muy atento porque es fácil pasarme el acceso (de hecho, me lo pasé varias veces).
El gps me maracaba que estaba próximo y de repente iba marcando que me alejaba y es que, ciertamente, ese lugar con la pared rocosa es la “entrada” a la primera de las grietas y la vegetación la ocultaba haciéndome creer que se encontraban aún más allá.
Si nos fijamos (cuesta de ver porque parece una pared rocosa uniforme) tras las dos rocas de primer plano se entrevé un pasadizo entre la masa rocosa de la izquierda y la que corresponde a la derecha
Solo cuando me acerco veo abajo la parte de tierra entre las dos paredes de roca
Ésta, la primera de las grietas, es la mayor de todas y por ello se le ha puesto el nombre de “La Rambla”, ya que permite el paso a través de ella. Las otras son mucho más estrechas y reducidas de tamaño de modo que apenas o incluso no se puede pasar a través de ellas.
La siguiente tiene la entrada obstruída por una roca encajada en ella, por lo que debería accederse arrastrándose por debajo o saltando por encima pero el desnivel hasta el fondo de la base de la grieta es considerable y la altura del fondo hasta la superficie, en ocasiones, puede llegar a superar los 10 metros.
Y otras son tan estrechas que no permiten el paso a través de ellas ...
Si, en cambio, vamos por arriba debemos estar muy atentos pues la vegetación de matorrales muchas veces las esconden y lo irregular del terreno podría provocarnos algún tropiezo y sería realmente muy peligroso caer en alguna de ellas. Máxime cuando debemos saltarlas para movernos en superficie
Por su interior, no obstante, parece que estés en otro mundo moviéndote por las entrañas de la Tierra
Continuará por otros lugares muy distintos a éste ...
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Miquel Rubio.
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